viernes, 15 de enero de 2016

2. Vuelta a la Naturaleza

La nueva cultura y el nuevo arte que surgen a finales del siglo XIX vuelven a sentir un gran gusto por la naturaleza y el paisaje.

Claude Monet fue un pintor impresionista, movimiento que se considera dentro del Modernismo. A partir del Impresionismo, la gran ciudad pasa a un segundo plano y cada vez interesan más las pinturas de paisajes, jardines y elementos de la naturaleza.

Recordemos que, aunque en el Romanticismo la naturaleza había sido un tema muy importante, en el Realismo los artistas empezaron a sentir más interés por la gran ciudad, pues el campo era símbolo del atraso mientras que en la ciudad se daban los grandes adelantos de la ciencia y de la técnica, como por ejemplo el alumbrado de las calles, los tranvías, el cine o las fábricas.

Puerta del Sol de Madrid a finales del siglo XIX, con los primeros tranvías que se usaron.



(Esta es la primera "película" de la historia del cine, de 1895. Se trataba de una toma de un minuto, hecha por los hermanos Lumière, en que se veía a unos obreros saliendo de la fábrica.)

A finales del siglo XIX, sin embargo, cambia la mentalidad de la población europea con respecto al progreso científico y técnico: este ya no se considera la clave para la felicidad humana, sino el resultado de la explotación de la clase obrera, a costa de la cual se producían los adelantos y la mejora de la economía. Por eso los artistas del Modernismo vuelven a usar motivos florales en la decoración (como vemos en muchos edificios y objetos del Modernismo catalán) y prefieren la artesanía a los productos industriales.

Vidriera de las ventanas de una casa particular, con motivos florales.

Puerta de una antigua casa modernista con forma de árbol. El dintel también está esculpido en forma de ramas, hojas y rosas.
Papel pintado para las cubiertas de los libros y para decorar, con muchísimas imágenes naturales.
En la época modernista estuvieron de moda incluso muebles con formas vegetales, como estas sillas con el respaldo en forma de hoja.
El Modernismo se rebela contra la falta de sensibilidad y el materialismo de la clase burguesa, la cual ha provocado un estilo de vida en las ciudades muy frenético y estresante. En las ciudades el ser humano está rodeado de cemento y de ruidos, y ya le resulta imposible disfrutar de la naturaleza y de la paz que produce el sentirse parte de ella.

Muchos autores modernistas españoles se enfrentan a la ciudad y a la industrialización en sus obras, creando una imagen idealizada de la vida en el campo. Juan Ramón Jiménez centra gran parte de sus libros de poesía en la vida en el campo andaluz (especialmente su libro más famoso en prosa poética, Platero y yo), y los novelistas Azorín y Pío Baroja comparan la paz del campo y la autenticidad de su gente con la falsedad y estupidez de la gente de ciudad y el caos de la vida urbana.

(En el siguiene link, Laura Castanedo recita el poema en prosa "La primavera" de Juan Ramón Jiménez. En él se muestra la belleza y la alegría del campo andaluz, opuesto a la vida en la ciudad).

En las artes modernistas también vemos cómo se rechaza la modernidad y se produce un retorno a lo antiguo, igual que en el Romanticismo. Esto se debe a que los modernistas creían que en épocas antiguas, sobre todo en la Edad Media, la humanidad todavía poseía una sensibilidad y una autenticidad que ya se habían perdido en el mundo moderno. Así, la publicidad y la pintura de la época contienen muchas imágenes de muchachas vestidas como ninfas o hadas de los cuentos medievales, y muchos edificios como los que encontramos en Barcelona parecen inspirarse muy libremente en las catedrales y palacios del Gótico medieval. 

Alphonse Mucha fue un importante dibujante modernista que realizó muchas ilustraciones para la publicidad de la época famosas por sus muchachas con ropas medievales o exóticas.
Antoni Gaudí es el arquitecto modernista español más importante. Su obra más ambiciosa fue la Sagrada Familia de Barcelona, que quedó sin terminar a su muerte. Gaudí la diseñó inspirándose en las grandes catedrales góticas de la Edad Media.

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